Arquímedes

Introducción
A lo largo de la historia aparecen personalidades que destacan en diferentes campos de una manera extraordinaria. Los hay en cada época y lo cierto, es que algunos demuestran una genialidad que trasciende al propio hombre y a las sociedades en las que viven, ejemplo de esto de lo que hablo son, entre otros; Leonardo da Vinci, Nikola Tesla, Tales de Mileto o el que nos ocupa, Arquímedes.
Cabe preguntarse si la excepcionalidad de estos hombres y mujeres es producto únicamente de su capacidad, o si también influye el hecho que sean apoyados ampliamente por sus contemporáneos. Porque lo cierto es que el mecenazgo o la financiación de sus trabajos, sirvió para liberar el intelecto o para hacer emerger una creatividad innovadora. Así pues, el poder; fuera ocupado por tiranos, regentes, demócratas, senadores o papas, entendió que la trascendencia de la memoria reside en los actos llevados a cabo y en la herencia que dejas como huella imperecedera a los que te siguen.
La no división
Cuando hablamos de ciencia en la antigüedad, hay que ser cautelosos, entre otras cosas porque entre ellos no existía una diferenciación entre el científico, el matemático, el filósofo, el teólogo o el político. Todo iba intrínsecamente unido ya que el establecimiento de una hipótesis parte de la formulación de una pregunta, es decir de un cuestionamiento previamente razonado. Así, la filosofía que se origina en el estudio sobre las grandes cuestiones, deriva en algunos casos a la demostración de las tesis acercándose al método científico que entendemos en la actualidad. No es extraño encontrar que un pensador sea médico, metafísico e inventor. Arquímedes, por tanto, no sólo es destacable por sus altas capacidades en cálculo sino también por su ingenio en la ejecución práctica de sus inventos. Conozcamos sus orígenes.
Biografía
Arquímedes nació en el 287 a.C en Siracusa, colonia griega en la actual Sicilia. Su padre, Fidias, fue astrónomo, lo que influyó de alguna forma en sus conocimientos en ese campo, incluso hay quien le atribuye a nuestro protagonista, la autoría del mecanismo de Anticitera, un aparato extremadamente complejo que calcula ciertas órbitas y rotaciones planetarias.
En su juventud se traslada a Alejandría donde ampliará su formación en diferentes disciplinas, especialmente en matemáticas. Mantuvo ciertos contactos con la aristocracia de Siracusa, como con su tirano Hierón y posteriormente con el hijo de éste, incluso hay fuentes que llegan a establecer cierto parentesco entre ellos.
Arquímedes fue, sin lugar a dudas, un adelantado a su tiempo pues sus teorías sobre los cálculos de las áreas y los volúmenes de superficies curvadas y planas, no fueron ratificadas hasta muchos años después. No sólo realizaba cálculo sino que también inventó diferentes aparatos que se usaron como instrumentación militar y civil, es el caso de la garra llamada por los romanos "manus ferrea", auténtica pesadilla para éstos, el odómetro para medir distancias, el tornillo sin fin, el rayo de calor a través del reflejo de espejos, incluso se llega a apuntar que fue el artífice de la invención del fuego griego que luego se usaría durante el imperio bizantino. Además ofreció la explicación física de las palancas y perfeccionó las catapultas.
Si nos fijamos, gran parte de la instrumentalización creada tiene una aplicación bélica, eso se debe a que Arquímedes vivió durante las guerras púnicas que enfrentaron a romanos y cartagineses, y Siracusa era uno de los bastiones aliados a los púnicos. Los romanos padecieron muchos de estos inventos en sus propias flotas, especialmente la manus ferrea que destrozaba las proas de los trirremes o el rayo de calor, que sería un sistema de espejos que, ayudados del reflejo del sol y focalizados en un mismo punto, haría que los cascos de las embarcaciones ardieran. Se ha intentado poner en práctica en la actualidad muchas de sus invenciones con resultados arbitrarios, pero para nada imposibles. La dificultad reside en que desconocemos las medidas exactas, las proporciones y las distancias que utilizó Arquímedes para calcular la efectividad. No obstante, la invención del tornillo sin fin y el odómetro entre otros, se perpetuaron en su uso hasta el día de hoy. El primero como método de extracción de líquidos y ciertos materiales sólidos y el segundo como herramienta de cálculo de distancias, de hecho los cuerpos de seguridad siguen usándolo para determinar la distancia de frenado en los accidentes de tráfico.
Realmente, los inventos no conformaban la parte más puntera de Arquímedes pues para él eran simples juegos o plasmaciones de ideas, su verdadero fuerte estaba en los razonamientos matemáticos y uno de ellos, y quizás el más famoso, fue el principio de Arquímedes por el cual: "Todo cuerpo sumergido en el agua experimenta una pérdida de peso igual al peso de volumen del fluido que desaloja", según parece esta teoría se le ocurrió estando en la bañera pues se dio cuenta que al sumergirse dentro de la misma, el nivel de agua ascendía, pronunciando la famosa palabra griega: "eureka", o lo que es lo mismo "lo encontré". Existen muchas anécdotas que adornan su figura, de hecho también disponemos de una historia en la que Hieron II le solicita que calcule la cantidad de oro de una corona para asegurarse del valor de la misma y sería ese el motivo, por el que hallaría la respuesta al enigma. Ante la imposibilidad de calcularlo por el método tradicional, la teoría del principio de Arquímedes daría una respuesta acertada a las necesidades del tirano. Es posible que todo se base en situaciones reales, pero que hayan sido, intencionadamente o no, exageradas o adornadas con posterioridad.
Lo que es indudable es que fue un hombre eminente y un matemático magistral. Se conservan algunas de sus obras como; El arenario, Sobre la esfera y el cilindro, el Tratado de los cuerpos flotantes, todos ellos máximos exponentes de las matemáticas actuales y que muestran una mente extraordinaria.
Aportes matemáticos
Cálculo del área y el volumen
1) Arquímedes fue pionero en el uso de métodos similares al cálculo integral siglos antes de Newton y Leibniz.
2) Área de figuras curvas: Calculó áreas bajo parábolas y otras curvas utilizando el método de exhaustión (aproximación con figuras poligonales).
3) Volumen de sólidos: Determinó el volumen de figuras como la esfera, el cilindro y el cono. Por ejemplo: Descubrió que el volumen de una esfera es 2/3 del volumen del cilindro que la circunscribe (mismo radio y altura). Este descubrimiento fue tan importante para él que pidió que se grabara en su tumba.
Método de exhausción
Anticipó el cálculo integral usando este método, que consistía en inscribir y circunscribir figuras poligonales a otras curvas para aproximar sus áreas o volúmenes. Lo usó para calcular con precisión π (pi) y áreas de segmentos parabólicos.
Aportación al cálculo de π (pi)
Aproximó el valor de π con gran precisión (es decir, aproximadamente entre 3.1408 y 3.1429). Lo logró usando polígonos regulares de hasta 96 lados inscritos y circunscritos en un círculo.
Aunque es un principio físico, Arquímedes lo fundamentó matemáticamente, usando conceptos de proporción y centro de gravedad.
Espiral de Arquímedes
Estudió la curva conocida hoy como la espiral de Arquímedes, donde la distancia al centro crece proporcionalmente con el ángulo. Analizó sus propiedades y calculó áreas relacionadas con ella.
Problemas y paradojas
Formuló y resolvió problemas que hoy consideramos parte de la teoría de números y combinatoria. Un ejemplo notable es el problema del ganado de Helios, una complicada ecuación diofantina.
Obras matemáticas más importantes
Sobre la medida del círculo
Sobre la esfera y el cilindro
El método
La cuadratura de la parábola
Arenario (estimación del número de granos de arena para llenar el universo)
Sobre las espirales
Arquímedes murió en el 212 a.C cuando Siracusa estaba en guerra con Roma. Según relatan clásicos posteriores, el matemático estaba trazando un diagrama en la arena cuando se le acercó un soldado romano haciéndole sombra. El sabio sin mirarle exclamó: "No desordenes mis diagramas" o "No molestes mis círculos", y el soldado, sintiéndose ofendido por su atrevimiento, le dio muerte al instante. Esta es una de las versiones porque en otra, el legionario acaba con su vida para quedarse con los objetos que porta sobre sus brazos creyendo que son de valor, incluso existe una tercera, que parece la más plausible, en la que el soldado le pide que le acompañe para verse con el general romano y que ante su negativa, le dio muerte. El acto despiadado de ese soldado, fue un auténtico mazazo para el comandante Marco Claudio Marcelo, que había insistido en que lo trajeran ante él con vida. La amplia fama de Arquímedes era ya reconocida por los romanos, así que la torpeza de su asesino fue tomada como un error de un valor incalculable.
Arquímedes fue enterrado en Siracusa, con una lápida decorada en su cúspide con una esfera dentro de un cilindro, en homenaje a sus importantes descubrimientos matemáticos. A pesar del abandono y del olvido de sus restos, dos siglos más tarde su tumba fue localizada por Cicerón, en ese momento magistrado de Roma en Sicilia, volviéndole a reestablecer la relevancia histórica que merecía.
El legado de este genio no es cuantificable. Su vida se sustentó en el estudio, pero sobre todo en asentar las bases que han servido a los que vinieron tras él. Una mente única en un momento excepcional.
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